Este
libro fue un regalo de una persona muy cercana a mi familia. No tenía ni muchas
ni pocas expectativas sobre el libro. Pero eso suele pasar cuando ves un libro
tanto tiempo en el escaparate de todas las librerías y piensas que sí, que será
bueno y que si todo el mundo habla de él, te encantará.
Ni mucho menos quiero
cuestionar a la autora, quizá por la poca edad que tengo, o por que no ando
buscando ese tipo de lecturas, el libro no me ha convencido del todo.
Mauro Larrea, un joven que
se dedicaba a la mina desde muy temprana edad, tiene que irse de España y
cruzar el océano para hacer frente a su vida, con sus dos hijos. Al cabo de los
años, a Mauro le llueve la fortuna pero de un día para otro, ve arruinada su
vida sin más. Y por supuesto, no está dispuesto a echarlo todo por la borda,
quiere recuperar su patrimonio.
Una historia cuyo argumento
está bastante bien, pero se me hacía bastante pesada de leer, y por lo tanto,
me sentía un poco "obligada" a terminar de leerlo.
Vuelvo a decir, que no voy
buscando este tipo de historias por lo que, a cualquier otra persona que le
guste este tipo de narrativa, seguro que está encantado con el libro.
¡Gracias
otra vez por leerme! :)
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